domingo, 16 de mayo de 2010

Mes 2- Los mitológicos (parte 2)



8- El uroboros

Quizás sea el monstruo más temido porque su destrucción nos abarca a todos.

Al creer que todos los mares y ríos están conectados como uno solo también se puede concebir un monstruo que se desarrolle y crezca en toda la amplitud de estas aguas. Allí está el uroboros, la serpiente infinita que se ha desarrollado de tal forma que ya se muerde su propia cola. Martínez Estrada lo definirá como la serpiente “que empieza al fin de su cola”.

Los alquimistas usaron su figura para representar la naturaleza cíclica de las cosas, el eterno retorno de todo.

Su paralelo en la mitología nórdica es el Jörmungandr, quien cuando llegue el final de los dioses será quien devore al mundo.


25 comentarios:

Anónimo dijo...

Uroboros (el que devora la cola), es el nombre técnico de este monstruo... (El libro de los seres imaginarios)

Jorge Cuesta

Carina dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Carina dijo...

Hay una información importante en wikipedia. No voy a transcribir desde ahí, copien el vínculo para abrirlo:
http://es.wikipedia.org/wiki/Ur%C3%B3boros
También los invito a checkear este vínculo: http://www.crystalinks.com/ouroboros.html Si se pierden con el texto en inglés, ni importa, fíjense que la imágenes estan cool ;)
El origen del Uroboro se remonta al 1600 en Egipto, de ahí pasó a Fenicia y después a Grecia. Aparece en la mitología nórdica, hindu, azteca, china y nativo americana
La imagen del Uroboro se utiliza para simbolizar el modelo de sistema cerrado del universo, de algunos físicos, aún hoy.

Anónimo dijo...

Este animal mitológico, representa el aspecto cíclico de la vida. Expresa la unidad de todas las cosas, las materiales y las espirituales, que nunca desaparecen sino cambian de forma perpetua en un ciclo eterno de destrucción y nueva creación. En algunas representaciones antiguas, el uróboros u ouroboros aparece complementada con la inscripción griega εν το παν (hen to pan), es decir todo es uno.
Es destacable que en aquellos tiempos lejanos, donde todo tenía explicación mágica, ya se pensara en el tiempo como cíclico, se hablara del eterno retorno. (En qué retorno estaremos ahora, ¿no será que estamos en el estómago del uróboros todavía?)
Hasta la próxima! Silvana F.

Anónimo dijo...

Lo cíclico, el mito del eterno retorno, me recuerda a esta letra:

"Déjame ver qué hay para saborear esta vuelta,
la carta no está siempre a tu alcance en los matutinos.
Loco de pensar que se dispute el poder y la gloria
y con el frio de un reino las almas congelar.
Cuanta verdad, cuanta mentira y cuantas palabras,
y todo ese motor para devastar tu inconciente.

¿Y en qué lugar habrá consuelo para mi locura?
¿Esta ironía con qué se cura? Si el final es en donde partí.
¿Y a quién llamar, a quién golpearle la puerta tan tarde,
con quién hablar cuando no hay nadie?
Si esta noche no puedo dormir.

Déjame ver qué hay para saborear esta vuelta,
la verdad, la mentira y la mueca de tu ingenuidad.
Cuantas palabras se disputan el poder y la gloria,
y cuantas vidas se pierden en el frio de un reino mortal.
Loco de pensar, queriendo entrar en razón y el corazón,
tiene razones que la propia razón nunca entenderá.

¿Y a dónde voy? siempre voy a buscar lo que es mio,
aunque el planeta termine en un círculo,
y el final es en donde partí.
No llores más, dame la mano contame tu suerte,
de esta manera quizás no sea la muerte,
la que nos logre apagar el dolor."

Para que la escuchen, adjunto enlace

http://www.youtube.com/watch?v=ozC9hETOt2I

No me atrevo a contestar el planteo de Silvana F.

Gustavo García

Sonia dijo...

Este monstruo se asocia a la alquimia, al gnosticismo y al hermetismo. Representa la naturaleza cíclica de las cosas, el eterno retorno y otros conceptos percibidos como ciclos que comienzan de nuevo en cuanto concluyen. En un sentido más general simboliza el tiempo y la continuidad de la vida. En algunas representaciones el animal se muestra con una mitad clara y otra oscura haciendo recordar la dicotomía de otros símbolos similares como el yin y el yang. Hay quien ha sugerido que el uróboros es un símbolo de autofelación.
Se cree que está inspirado en la Vía Láctea, pues algunos textos antiguos hacen referencia a una serpiente de luz que mora en los cielos. En la mitología nórdica, la serpiente Jormungand llegó a crecer tanto que pudo rodear el mundo y apresarse su propia cola con los dientes. De la dinastía Chou en China (1200 ac) se han hallado grabados de ouroboros, simbolizando la continuidad de la vida con el dragón mordiéndose la cola.
El uróboros u ouroboros es un símbolo ancestral que muestra un gusano, una serpiente o un dragón alado engullendo su propia cola y formando así un círculo. En algunas representaciones antiguas aparece complementada con la inscripción griega Hen to pan, es decir el Uno, el Todo. El ouroboros reune, así, los contenidos de varios símbolos en uno: la serpiente, las alas, el suicidio, el círculo.
La serpiente representa la sabiduría ancestral, el mito primigenio del mundo subterráneo. Las alas, más allá de simbolizar lo espiritual, son la sublimación de lo material. La autodestrucción o suicidio es el hecho de que el animal se devore a sí mismo, que es a su vez metáfora del ciclo vital, donde no hay frontera clara entre inicio y fin. El círculo es la idea sintética de la perfección.
Hasta la próxima, saludos.
Sonia Berns

Anónimo dijo...

¡Hola a todos! ¡qué interesante es este monstruo! No sabía mucho sobre él, aquí les dejo algo más para enriquecer el saber:
"Para el psicólogo suizo Carl Gustav Jung el ouroboros se manifiesta como un símbolo unificador, que presenta la conjunción de los opuestos, la liberación de la tensión de los antagonismos, base de su psicología analítica que busca deshacer la división entre lo inconsciente y lo conciente mediante el proceso de individuación.


Jung vio en el ouroboros el mandala básico de la alquimia que existe desde la antigüedad, observó en esa serpiente que se engulle a sí misma uno de los arquetipos de la psique humana.

P/D Espero que les resulte interesante como a mi, besos.
Andrea Niz

Unknown dijo...

Nunca había oido hablar de este monstruo!La verdad que me sorprendió bastante, su figura está cargada de símbolos y son muy interesantes los análisis que se hacen de él.
Debo decir que la imagen que está en tonos sepia me recuerda mucho a algunas representaciones del Basilisco. En fin, saludos!
Ignacio Cerbino

Anónimo dijo...

¡Un espécimen repleto de interesantes significados!
En el ocultismo, el ouroboros es la materia sin forma, la fuerza desencadenante que se representa en forma de serpiente que se muerde la cola, y que no es el principio ni el fin. También es el círculo del cosmos. A veces se representa en forma de dragón que destruye, diluye, funde, etc.
Hermes, dios de la Alquimia, define el ouroboros de la siguiente manera: "SERPENS CUIUS CAUDAM DEVORABIT" ("serpiente que devora su propia cola"). Este monstruo simboliza el mercurio alquímico, la unidad cósmica, base del pensamiento hermético (UNO-TODO). Su forma circular, símbolo del mundo, es una alusión al "principio de clausura" o al secreto hermético. Enuncia la eternidad concebida como "eterno retorno": lo que no tiene ni principio ni fin.
En la Alquimia, el ouroboros simboliza la naturaleza circular de la obra alquimista que une los opuestos: lo consciente y lo inconsciente.
También es un símbolo de purificación, que representa los ciclos eternos de vida y muerte.

Espero que les sea útil. Saludos.

María Soledad Sain

Anónimo dijo...

Sobre "El Eterno Retorno", no me simpatiza la idea de que todo lo que fue volverá a ser. Igualmente recomiendaría leer a Borges sobre el asunto, especialmente el ensayo "El Tiempo Circular" del libro Historia de la Eternidad.
(Ya firmé)

Fran Vanrell dijo...

Muy interesante todo. Confieso que era completamente ignorante de la existencia del Ouroboros, no sé si ahora podré dormir igual de tranquilo por las noches...

No sé en que momento de la historia, pero en alguno se empezó a cambiar la forma de concebir el mundo, al menos de este lado del planeta. Aquellas creencias de tiempos circulares, y cíclicos se desdoblaron y transformaron en nuestras líneas del tiempo... que bien podrían volver a unir sus extremos (si es que estos existen).

Saludos...

Anónimo dijo...

hola! un par de acotaciones. en primer lugar, si, el diseño del uroboro es similar al de jormungandr, pero esta no se come el mundo en el ragnarog, sino q participa en la batalla final, y mata a tohr.
respecto al uroboro, la imagen de la serpiente q se muerde la cola fue usada por muchas culturas. algunas lo atribuyen al alfa y omega, o principio y final de todas las cosas, tambien dentro de una concepcion ciclica del tiempo.
los españoles coloniales usaban anillos con la forma del uroboro para prevenir las enfermedades de transmision sexual, aunque solo los hombres, no las mujeres. en el museo etnografico de santa fe, ahi varios de estos anillos coloniales expuestos, por si los quieren ir a ver, estan muy buenos y son muy viejos.
fuera de eso, se muy poco sobre este tipo de monstruos, asi q viene bien la eleccion; capaz q mande algun escrito!
saludos!
carolina b. ramirez.

Anónimo dijo...

Percibo a este ser como el más abarcativo en cuanto a ferocidad y a ataque, dentro de la gama de monstruos acuáticos. La idea de lo cíclico, la noción de que su daño vuelve a empezar allí donde acaba de finalizarlo, ¿no se parece acaso al recorrido de tantas acciones humanas relacionadas con la ausencia de lo ético? La MENTIRA, por ejemplo, no sería acaso una especie de uroboros? Quizás no esté tan desacertada mi ocurrencia.
María Aurora Gazzino.

Anónimo dijo...

buscando información sobre este "animalito" del que poco sabía, me encontré con un libro titulado La serpiente uróboros, cuyo autor es E. R. Eddison. Obra que en alguno de los comentarios que leí se compara al señor de los anillos de Tolkien.
Este libro se puede consultar en el siguiente Link http://www.librosgratisweb.com/html/eddison-erik/la-serpiente-uroboros/index.htm
Hasta la semana que viene.
Daniela G.

Angie dijo...

Ni sabía de la existencia de este monstruo...

Anónimo dijo...

El Uróboro u Ouroboro (en griego "ουροβóρος") era un ser mitológico enorme que estaba presente en muchas mitologias: la nórdica, la griega, la egipcia e incluso en la china. Era una serpiente, gusano o incluso dragón representada con su cola en su boca, devorándose continuamente a sí misma. Expresa la unidad de todas las cosas, las materiales y las espirituales. En algunas representaciones antiguas, el uróboros u ouroboros aparece con la inscripción griega εν το παν, es decir, todo es uno. Se asocia a la alquímia.
BELÉN ZAVALLO

Anónimo dijo...

En la mitologia Yorubá ( y dentro del panteón del candomblé )también está la serpiente que "se muerde" la cola... aunque no como un ser horripilante y monstruoso sino como una deidad de la naturaleza...

Graciela Terzaghi

Román dijo...

Coincido en la ignorancia, jamás había escuchado hablar de este monstruiiito. el cuento breve es un desafío espectacular, a ver si me sale algo. No prometo.
Saluditos. Román Scattini

Anónimo dijo...

perdón, ayer realicé comentario sobre uroboros, en el lugar de las actividades. Muy interesantes los aportes, anexan más información a la que ya tenía sobre esta figura. Abrazos. Alejandra Z.

Manuel Ríos dijo...

conocia uroboros por la alquimia.. si si...
geniales los aportes

Anónimo dijo...

Con respecto al comentario de Fran Vanrel, hay tres maneras de concebir el tiempo: Cíclica, lineal, pero también hay una teoría que considera al tiempo en forma espiralada ( a la que adhiero. Opción que tienen los que no admiten la cuestión lineal, tan cercana a las teorías del orden.-

Alejandra Z.

Anónimo dijo...

hola, es la primera vez que escucho a este monstruo. me nutro con la información y después comentaré. Natalia Cornejo

Maria dijo...

María Rodriguez

Anónimo dijo...

Me pareció interesante este artículo, ya que varias veces se ha hablado del tiempo circular. Lo subo en dos partes.

El tiempo en el mundo andino

Luz Castillo Vacano
JEFE DE INVESTIGACIÓN
Museo Nacional de Etnografía y Folklore (Musef)- Bolivia

“El futuro está atrás, por eso la wawa llevamos en la espalda” Kullak Angela Layme

Aristóteles propuso un ciclo regular y lineal en las formas de gobierno que se sucedían en su ámbito sociocultural, más tarde, San Agustín planteó que el tiempo existe solamente en el espíritu del hombre porque es donde se mantienen presentes el pasado, el presente y el futuro. Sin embargo, Marx postuló modos de producción de la sociedad que se suceden unas a otras en un orden determinado y Morgan formuló que la historia de la raza humana sigue una secuencia común. Así es como occidente plantea la linealidad del tiempo.
En cambio las culturas no occidentales conciben el tiempo de otras formas, ligadas a la dimensión mítica o religiosa. Una de ellas es la cultura andina, que ha concebido el tiempo bajo dos premisas: “Indivisibilidad entre tiempo y espacio” y “Esquema circular-espiral del tiempo”.


Pacha: El tiempo y el espacio
En la cosmovisión andina, el concepto de tiempo y del espacio se conjugan en uno sólo: Pacha. Aymaras contemporáneos indican que pacha es más que esa conjunción, es el cosmos. Este cosmos es el tiempo-espacio donde habitan todos los seres vivos, y por estar vivo, es dinámico, un fluir de energías.
Se dice que existen tres dimensiones del Pacha: el nayra pacha, que corresponde a un espacio y un tiempo pasados, el jichha pacha, el presente y el jutiri pacha o qhipa pacha, el tiempo y espacio que vendrán, el futuro. Parte del nayra pacha fue el ch’amak pacha, un tiempo de cataclismos que ha sufrido la tierra y las culturas que históricamente es denominado colonia española.
Antes de ella existió el Qhana pacha que indicó el florecimiento de Tiwanaku y del Tawantinsuyu. Hoy, los pueblos andinos conciben que se aproxima una edad de cambio y transformación, un Pachakuti, que dejará atrás y para siempre la oscuridad del ch’amak pacha.

Graciela Chisty

Anónimo dijo...

Esta es la continuación:

El tiempo en la concepción andina
La concepción circular-espiral del pacha es concebida como un proceso cíclico de cambios generativos que ocurren en ese cosmos. Esta dinámica se basa en la cultura andina y es así que cada acción tiene un momento y un espacio: el ciclo vital marca la vida humana y la vida mítica en donde todos los seres nacen, crecen, se reproducen, mueren para volver a nacer. La fiesta tiene un ciclo: la música, la danza y la ritualidad. Los productos tienen su propio ciclo enmarcado en el calendario agrícola que marca los lugares y tiempos de siembra y cosecha.
La circularidad del tiempo consiste en la repetición de edades. La comunidad andina se encuentra a sí misma transcurriendo un presente, el jichha pacha, que es una edad o época precisa. Como ya ha vivido el pasado o tiene referencias de él, conoce el nayra pacha, lo puede “ver”, por eso vive el jichha pacha mirando el nayra pacha. Pero no conoce el futuro, no lo puede “ver” y es así como avanza de espaldas al jutiri pacha.

El tiempo en la concepción de occidente
La concepción del tiempo en occidente es diferente por contemplar la “divisibilidad entre tiempo y espacio”, además de considerar “el esquema lineal del tiempo”.
Bajo este esquema se tienen dos conceptos diferentes para cada dimensión: tiempo, espacio y sucesión correlativa de periodos (desde un origen, un inicio, un desarrollo y una etapa final) que supondría cambios significativos para dar inicio a otro periodo.
La concepción espiral del tiempo en el mundo andino consiste en concebir el tiempo como un ciclo, con edades o etapas que se repiten, pero no en forma exacta, sino cuantitativamente distintas, aunque manteniendo su cualidad. Así el Ch’amak pacha es una edad de oscuridad, dominio y esclavitud, mientras que el qhana pacha es una época de luz, cultura y autonomía en la conducción de los intereses y destinos históricos. La etapa a la que se aspira es el Wiñay pacha qhana, edad ideal de vida y luz.

EPÍGRAFE
La cultura andina concibe la dimensión del tiempo ligada a la del espacio y, además, bajo una idea de circularidad en la que el pasado es lo que se ve y el futuro lo que no se conoce.

Fuente bibliográfica:
*Tres reflexiones sobre el pensamiento andino de Therese Boysse-Cassagne y otros autores.
*Verbo Divino de Vicente Mamani
*El origen de las Fiestas Andinas de Manuel Alvarado.

Graciela Chisty