jueves, 28 de abril de 2011

Mes 2- Aves (parte 1)














La calandria

Ute Bergdolt de Walschburger, escritora alemana que recorrió y documentó las leyendas de estas tierras en Leyendas de nuestra América. La historia de la calandria pertenece a Venezuela.

Un indio joven y esbelto llamado Urijamo tenía que dar las pruebas para convertirse en guerrero, pero se retrasaba constantemente por estar entretenido tocando una flauta que él había fabricado. Finalmente terminó su arco y sus flechas, con ellas tenía que cazar, y entregar al jefe de la tribu, una gallineta, un pato y una paloma. Internose en las selvas del Orinoco sin encontrar ninguna de las aves. Lleno de furia gritaba contra el Gran Espíritu mientras arrojaba flechas hacia el cielo, hacia cualquier ave. “Todas sus flechas dieron en el blanco; los animales ensangrentados iban cayendo, pero a Urijamo no le importaba cuántos mataba.” El Gran Espíritu se enojó, cansado de ver aquella matanza “dirigió los pasos del joven hacia el gran pantano donde las aguas y el fango lo aprisionaron”. Los pájaros que se habían escondido de las flechas volvieron a burlarse, cantando cada uno una melodía diferente y propia. El joven perdía la vida y el Gran Espíritu convirtió su cuerpo en una nueva ave, con los colores de los que lo rodeaban y capaz de cantar las canciones que había oído siendo humano. Así nació la calandria.

13 comentarios:

MIRTA dijo...

De la calandria

En un paisaje de adobes
y de piedras solitarias,
debajo de cielo puelche
una calandria cantaba

(En el corazón tenía
una guitarra hechizada)

Cuántas cosas le salían
de su sangre enamorada:
todo el canto de la tierra
le cabía en la garganta

(¿Qué dios remoto y silvestre
le regaló tanta magia?)
JuanCarlos Bustriazo

Anónimo dijo...

Una versión argentina:

"Cuenta una leyenda del Noroeste, que una india llamada Kereminka enamoraba a todos los jóvenes de la tribu con sus cantos y encantos. Encendía fuegos en ellos y luego arrojaba agua fría a su pasión. Siempre cantaba indiferente cuando descubría que algunos se quitaban la vida provocados por su desdén.

Sumajkaig no perdió la esperanza de lograr el amor de la esquiva Kereminka. Él era diferente. Ella lo veía diferente: más fuerte, más hermoso, más tenaz.

En principio se miraban tan enamorados… Todos pensaron que -por fin- los caprichos y la coquetería de la muchacha habían sido vencidos.

Se equivocaron: poco tiempo duró el amor de Kereminka. Sencillamente, se cansó de una fidelidad que no había sido creada para ella. Sus ojos volvieron a detenerse en otros hombres y su canto recuperó la vieja y fría melodía armoniosa.
Sumajkaig, triste y despechado, lloró su dolor, pero cuando la herida sanó, el deseo de venganza ocupó el lugar de la pena. Lleno de furia, invocó a todas las fuerzas malignas para vengar su amor. Cuando el castigo se hizo realidad, Kereminka tomó la forma de un ave, la calandria, linda y virtuosa para el canto como lo había sido en su vida humana. Tuvo también, a partir de entonces, la habilidad de imitar el canto de todos los pájaros y todos los rumores de la selva.
Dicen que hay un lago de aguas rojas donde yacen las almas de los hombres que se suicidaron por ella y que el viento cordillerano hace escuchar a la calandria las quejas de aquellos enamorados. Ella los consuela con su canto.
Fuente: http://www.maritacazapalabras.com.ar/la_calandria.htm
Silvana F.

Anónimo dijo...

Desde pequeña me fascinó la leyenda del picaflor o "Mainumbí" como le llaman los guaranies... Quiero compartirla con ustedes, compañeros del Seminario y allí va.

Cuentan los guaraníes que Flor era una joven india más linda que el sol. Cuando cantaba, su voz era tan dulce que hasta los pájaros callaban para escucharla.
Flor estaba enamorada de Ángel, pero él era de una tribu vecina, enemiga -quién sabe por qué- de la de ella. Por ese motivo, ellos tenían que encontrarse a escondidas en un lugar secreto del bosque, junto a un arroyo.
Un mal día, los descubrió una india que, muerta de celos, le fue con el cuento al padre de Flor. Desde entonces, no sólo los novios no pudieron volver a verse, sino que además el padre dispuso que ella se casara con otro.
La Luna, que protege a los enamorados, le dijo a Ángel:
-Ayer me avisó mi amigo el Viento que Flor lloraba desconsoladamente porque su padre quiere casarla con un muchacho de su tribu. Ella gritaba que prefería morir antes de cumplir con esa orden.
-Por favor, Luna –dijo Ángel con desesperación- necesito verla cuanto antes.
-No puedo acceder a tu pedido: el ruego de tu amada fue escuchado por Tupá y, en lugar de quitarle la vida, la ha transformado en una flor.
-Dime, Luna ¿cuál es el nombre de esa flor?
-Ay, mi amigo, ni el Viento lo sabe...
Ángel no podía comer ni dormir y, en medio de su dolor, suplicó al dios Tupá que lo ayudara a reunirse con su amada. Poco a poco, fue notando que su cuerpo cambiaba: se hacía cada vez más y más pequeño y, lentamente, se iba cubriendo de plumas. A los pocos días, se había convertido en un pajarito diminuto de hermosos y brillantes colores. Desde entonces, besa las corolas de todas las flores en busca del sabor dulce de los labios de su Flor.

Graciela Terzaghi

Ludmila dijo...

El nombre científico de la calandria es "Mimus saturninus" (del latín Mimus, imitador, mimo). Una de las principales características de estas aves es su facultad para imitar el canto de otras (que reproducen introduciendo ligeras variaciones), esta es la causa del nombre científico Mimus, y de que en algunos países se las denomine popularmente, burladores (en Estados Unidos 'mockingbirds').
Los españoles, a su llegada al Río de la Plata, dieron a este pájaro el nombre de "calandria" porque lo encontraron semejante a la calandria española o alondra grande aunque, no es mucha la semejanza entre las dos aves, excepto en su color, más bien apagado.

Leyenda de la calandria común

En Santiago del Estero la leyenda dice que en el bosque a orillas del río Salado, vivía en un tiempo, una mujer con su hija, muy felices hasta que la niña enfermó y murió. La madre, trastornada por la pena, se internó en el monte y no se supo más de ella, pero al tiempo se oyó un canto de pájaro: se había transformado en calandria.
Por eso dicen que son un ejemplo de madres.

Anónimo dijo...

Buen día:
Comparto este enlace donde hay más leyendas sobre pájaros por todos conocidos, saludos! http://www.redargentina.com/leyendas/leyendabenteveo.asp
Belén Zavallo

Anónimo dijo...

LA CALANDRIA O QUEREMINCA

La Quereminca era una bella imilla cuyos encantos enamoraban a los jóvenes. Élla encendía el fuego (miná) de la pasión en éllos, para luego desdeñarlos. Desesperados, algunos de éllos se suicidaron.
Pero un joven llamado Sumajkaig se sintió capaz de hacerse amar (wiñapaig) y así pareció en principio, pero pronto quereminca se cansó y comenzó a mirar a otros. Su enamorado, triste y desesperado, lloró su pena, la que se convirtió en odio y sed de venganza. Invocó a Illaepa y a todas las fuerzas ocultas para vengar su amor. Y el castigo se hizo realidad: Quereminca fue convertida en ave, tan cantora como bella había sido y con un poder de imitación especial, pues imitan las queremincas el canto de todos los pájaros y todos los rumores de la selva.
Cuentan los amautas que hay un yahuar Kucha en el fondo de un precipicio, cerca de una montaña. El lago es color rojo como la pasión que la imilla despertaba en los hombres. El viento llevaba hasta Quemirinca las voces de los suicidas que reclamaban su presencia pero a cada queja de amor élla responde: Hutam, hutam, istita.
http://www.folkloretradiciones.com.ar/superstic_leyendas/index.htm

Juan Guris.

Anónimo dijo...

Illapa: Trinito-Dios Inca del Rayo, trueno y relampago.

Juan Guris.

Fran Vanrell dijo...

En el folclore argentino -particularmente en la región pampeana- la calandria aparece como símbolo de libertad, y por ser un pájaro que no tolera el cautiverio, dejando de emitir sus trinos y muriendo si se encuentra enjaulado. Es también un ave asociada con el amor y -como es lógico tratándose de una especie tan cantora- con la alegría y la música. La experiencia demostró que no se puede capturar calandrias para tenerlas como aves de canto en jaulas -algunos afirman que es posible solo si se las cría desde pichones- en tiempos coloniales, en cambio, se hicieron intentos exitosos de amansamientos, alimentándolas y manteniéndolas sueltas sin que abandonasen las proximidades de la casa del criador, que así gozaba de las melodiosas vocalizaciones de estas aves capaces, por otro lado, de imitar el canto de otras especies y silbidos humanos (virtud que en otros países les valió el nombre de "burladores").

Respecto del clima, se dice que si saltan en distintas direcciones, cantando, anuncian cambios de tiempo o lluvias; si sacuden las alas habrá viento; en parte del oeste sostienen que cuando durante el invierno imitan el canto de las aves, están llamando al viento zonda, y en el noroeste se dice que en general su canto en esa época del año atraen el frío.

El comportamiento de la calandria también significa otros presagios: si canta cerca de la cocina avisa visitas, si lo hace en el patio avisa que habrá novedades y en general su canto es buen augurio, particularmente durante la mañana. Algunas dicen que es malo que aniden cerca de la casa porque es señal de muerte, pero otros sostienen que si eso ocurre presagian armonía en el matrimonio.

Información extraída de:
http://www.oni.escuelas.edu.ar/2003/LA_PAMPA/362/Calandria.htm

Anónimo dijo...

¡Qué bueno que está rescatar las leyendas de nuestra fauna autóctona!

Franco Fontanini

Anónimo dijo...

Estas leyendas que dan la explicación del origen de distintas especies, ya animales, ya vegetales, pueden rastrearse hasta la antigua Grecia, en las Metamorfosis de Ovidio.

Valeria Vaccari

Marta Alicia Pereyra Buffaz dijo...

La Calandria común Mimus saturninus

Ave carácterística de América y Argentina. Habita las llanuras algo arboladas, bordes de bosques y áreas rurales hasta la patagonia. El plumaje es sencillo, de un gris pardusco que se aclara bastante en la parte ventral. Tiene las alas negras con manchitas blancas, la cola es negruzca con la punta blanca, en la cabeza posee una línea de pluas blancas a modo de ceja. Es un ave entre mediana a chica, mide alrededor de 26 cm.

En el suelo se desplaza a carreritas y saltitos elevando la cola y bajando las alas. Se alimenta de insectos o larvas y frutos. Construye un nido en forma de taza con ramitas y tallos que ubica a mediana altura en árboles o arbustos. Pone 4 o 5 huevos de color celeste claro salpicados de castaño rojizo que miden aprox. 28 x 17mm. A veces el tordo o renegrido pone huevos en los nidos de calandria que ésta incuba sin mayor problema. El nombre científico Mimus significa burlón, imitador o bufon, alude a su particular manera de imitar otros cantos de aves y animales. Dueña de mitos y leyendas, se cree por ejemplo que su lengua hecha polvo sirve para acelerar el habla en los niños. También, según su manera de cantar pronostica cambios climáticos. Muchos hombres de letras le han dedicado relatos y bellos poemas, entre ellos Juan Burghi que en su libro “Pajaros nuestros” escribió.

Un manto gris que sobre el ala estría

y el pecho claro en descubierto deja;

sobre el ojo una línea, blanca ceja,

y en su canción es donde empieza el día.

Un trino y otro, y otro todavía.

Cada trino en Oriente se refleja

en una tenue claridad bermeja…

Un trino y otro y otro más: el Día.

Agua, brisa, color, música, verso:

la voz de Dios que alumbra el Universo

en un “Fiat-Lux” de límpida armonía.

En el verso la música se exalta;

la brisa aroma y el color esmalta,

y el agua es gracia que bautiza el día.

http://historianatural.wordpress.com/2008/11/26/la-calandria-coun-mimus-saturninus/

En esta página se puede escuchar su canto:
http://www.oni.escuelas.edu.ar/2003/LA_PAMPA/362/Calandria.htm

Anónimo dijo...

Me gustó mucho la frase: "libre o muerto, como calandria" muy argentina, muy cercana al amor que nuestro pueblo ha desarrollado por la libertad, históricamente hablando (seamos libres, lo demás no importa nada ) llego tarde siempre a los comentarios, por conectarme los domingos. Les dejo un pequeña leyenda para finalizar: Una leyenda correntina dice que una bella joven se enamoró de un joven forastero, quien, luego de obtenidos sus favores le dijo que era el dios Cuarajhi (sol en guaraní) y que debía regresar al cielo. La noche se aproximaba y él debía partir. Ella, para poder seguir viéndolo se subió al a+árbol mas alto y desde allí, mientras lloraba la desdicha de perderlo, se transformó en pájaro. (leyenda del _uratú)


Alejandra Zubiría.-

Anónimo dijo...

sugiero entre en esta página http://leyendasdellitoral.blogspot.com/2010/01/la-calandria-2.html
donde hay una leyenda muy bonita sobre el canto de la calandria, la cual no transcribo porque es muy extensa.
Saludos
Daniela G